Las prácticas empresariales de salud y seguridad impactan de diversa forma a mujeres y a hombres mientras sigan vigentes estereotipos y roles de género.
Apenas unos días después del #9M, la contingencia y crisis por el COVID-19 se detonaron, acaparando la atención de los medios y de las autoridades.
Las mujeres con discapacidad son uno de los grupos poblacionales más afectados por la discriminación laboral y corren mayor riesgo de sufrir diferentes tipos de violencias.
Para garantizar el principio de igualdad de remuneración por trabajo igual, es importante establecer indicadores de igualdad salarial y de los factores que influyen en las brechas salariales.
Algunos ejemplos de riesgos psicosociales son: el estrés laboral, la violencia en el trabajo, el acoso laboral, el acoso sexual, la inseguridad contractual y los conflictos de vida laboral-vida personal.
Las mujeres en la actualidad se enfrentan a un alto grado de exigencia personal, familiar y laboral, presentándose otras problemáticas que afectan su desarrollo profesional.