Las mujeres con discapacidad son uno de los grupos poblacionales más afectados por la discriminación laboral y corren mayor riesgo de sufrir diferentes tipos de violencias.
Para garantizar el principio de igualdad de remuneración por trabajo igual, es importante establecer indicadores de igualdad salarial y de los factores que influyen en las brechas salariales.
Algunos ejemplos de riesgos psicosociales son: el estrés laboral, la violencia en el trabajo, el acoso laboral, el acoso sexual, la inseguridad contractual y los conflictos de vida laboral-vida personal.
Las mujeres en la actualidad se enfrentan a un alto grado de exigencia personal, familiar y laboral, presentándose otras problemáticas que afectan su desarrollo profesional.
Lamentablemente, el acoso sexual es una situación que está profundamente arraigada en nuestra cultura, por lo cual ninguna empresa está realmente exenta de vivir con la problemática.
Es importante aprovechar esta fecha para visibilizar los retos que aún tenemos por delante, tanto como país, como al interior de nuestras empresas y organizaciones.